Una ojeada interior

76... Hace días que vengo queriéndote imaginar hoy con 76 años que hubieras cumplido. Me cuesta porque tengo tu imagen grabada, intento ponerte muchas mas canas, mas arrugas por supuesto, mas cansancio, pero seguro que muchas mas sonrisas también. Te sigo soñando, buscando, anhelando y necesitando. Son tantas las veces que me paro a pensar en lo diferente que seria todo si tu estuvieras aquí... Y cada día me sorprendo mas de todas las cosas que aprendí de ti, apenas sin advertirlo. Te sigo echando de menos todos los días. Sigo entendiendo tantas y tantas cosas. Me gustaría tanto poder charlar contigo y darte la razón en infinidad de ellas. Feliz cumpleaños mama. Te quiero.

Hace mucho que no escribo aquí, en mi rincón particular. Y no sera porque no me vengan cosas a la cabeza, que en mas de una ocasión me gustaría plasmar o simplemente liberarme de ellas. Como ha acabado el 2013 y empezamos nuevo año. Y además mi reloj interno esta algo alterado.... me he decidido. Además, la ultima entrada que hice hace ya bastante, no tiene mucho sentido ya. Es curioso como las cosas se rompen, cuando menos te lo esperas, todo puede cambiar, hacer tambalear tu tranquilo y feliz mundo. Uno que se acostumbra mas o menos a un estado, en el que se considera afortunado, y de pronto, todo se va al garete. El numero 13 siempre me ha perseguido en mi vida, o yo a él. Por eso este pasado ya 2013 lo comencé pensando que seria mi año. Y bueno, ha sido uno mas. Aunque me he sentido mas sola de lo habitual. Estamos tan lejos, ¿como hemos podido perder todas esas cosas que nos hacían uno?, y porque cuesta tanto dar ese primer paso, tal vez porque uno no esta seguro de si